Los oficios: monitora de patines.

La última mamá que nos visitó para enseñanos su oficio fue Ruth que es monitora de ocio y tiempo libre, pero para que los niños lo entendiesen un poco mejor la presentamos como monitora de patines / patinadora. 

Nada mas verla aparecer por el patio, cuando todavía estabamos en el recreo, todos los niños  estaban entusiasmados. 

Así que enseguida subimos a clase para descansar un poco, beber agua y empezar a aprender un montón de cosas con ella. 

Lo primero y mas importante si queremos ser patinadores son las herramientas que necesitamos. Los patines y el casco son muy importantes y es lo que todos sabíamos ya... pero también es importante ponerse rodilleras, coderas y muñequeras. Ruth nos enseñó las suya y nos ayudó a recordar las partes de nuestro cuerpo. 

Estamos listos para nuestra primera clase de patines. Así que bajamos al patio y la mamá nos preparó algunos juegos de los que hacen los niños cuando estan aprendiendo a patinar. Nosotros no teníamos patines, pero podíamos jugar igual. 

En primer lugar el juego de las colitas: todos teníamos una colita enganchada y teníamos que jugar a coger las de los compañéros. Que divertidooooooo. 

Ya habiamos calentado, así que llegó la hora de preparar el circuito. Conos y cuerdas y mirando bien cómo lo hace nuestra patinadora para no equivocarnos. Esta actividad la hicimos por equipos, porque aunque parecía sencilla debíamos estar muy atentos para no equivocarnos. Nos costó un poco al principio, pero terminamos haciéndolo de maravilla. 

Y para terminar el juego de las ovejas y el lobo. Muy divertido y en el que practicamos trabajar con un compañero (en equipo) para pillar a las ovejas. 

Con esto terminamos la sesión de patines. Volvimos a clase para beber un poco de agua y refrescarnos, pero esto no había terminado. Ruth también es monitora y sabe muchos mas juegos para niños, así que se quitó sus patines y todos los complementos y se preparó para contarnos el cuento del marinero Pepe. 

Estuvimos muy atentos de principio a fin, y no nos perdimos ni un detalle. Y ¿qué era los mas importante para el marinero Pepe? Pues su barco de papel. Así que nos pusimos manos a la obra y con todo el material que había preparado la mamá nos hicimos un precioso barquito de papel. 

Muchas gracias mamá, por enseñarnos tu oficio y hacernos pasar una mañana tan divertida. 

Desde aquí doy las gracias a todos los papás que han participado en esta actividad y han entrado a nuestra aula cargados de ilusión y de ideas estupendas. No sólo por todo lo que nos habéis enseñado, sino por las ganas que habéis puesto y lo bien que lo habéis hecho. Para los niños ha sido estupendo y tendrías que ver sus caras todos los días esperando a un nuevo papi que nos viniese a enseñar su profesión. Sois estupendos.